Las empresas deben facilitar constantemente pruebas que demuestren que sus actividades son sostenibles a largo plazo y a todos los niveles, lo que garantiza que su contribución a la sociedad y el medio ambiente sea positiva, algo que exigen tanto las políticas como los empleados.
Esto también afecta a los departamentos de TI, que deben asegurarse de que disponen de una infraestructura sostenible. No obstante, esto implica algo de tiempo y dinero, como mínimo.
¿Es posible? ¡Pues claro! Descárguese este libro blanco y descubra cómo lograr que la TI sea sostenible y rentable